CULTURA, HISTORIA Y DESARROLLO LOCAL

Cuando decidí seguir la senda educativa como forma de vida y desarrollo profesional (por un buen tiempo me dediqué a la investigación histórica), también opté por profundizar en tema de cultura local a partir de la atracción que ejerce sobre mí la Historia social y de las mentalidades.  Sin embargo, al poco andar me surgió la problemática ¿que entendemos por cultura?

Al profundizar para dar la respuesta a mi interrogante, comencé a descubrir que la cultura es una dimensión específica de los humanos, junto al tiempo, al espacio y el espíritu.  En cuanto a su contenido, comprende todo lo que el hombre cree y todo lo que el hombre crea, teniendo como punto de inicio sus propias convicciones y cosmovisiones. Lo Cultural comienza, entonces, con un simple acto de fe, con la afirmación voluntaria de una creación, que afortunadamente hasta el momento no puede ser impuesta.

Se debe entender la cultura como un todo sistémico, cuyas partes están articuladas, como un conjunto de herramientas, conocimientos  y comportamientos adquiridos, que se transmiten de una generación a otra.

Sobre esta Idea y concepto, se basa necesariamente la subsistencia de la especie humana y sus posibilidades de progreso.  “todos los pueblos, en todas las épocas y lugares han poseído cultura” (Geertz: “Conocimiento Local”: 1994); por lo tanto, es también una estrategia adaptativa.  Es una plataforma que tiene múltiples instrumentos de transformación del medio.  Como tal, la cultura es en primer lugar, un acto individual,  ya que implica la aceptación profunda de cada componente, posteriormente es también, un acto colectivo en la que intervienen la totalidad o, al menos, la mayoría de los miembros de una comunidad.

La Cultura no es algo accesorio, dejó de ser el anexo que se agrega a los temas de desarrollo, sino que hoy la dimensión cultural se ha convertido en un tema central tanto en el ámbito político como académico, que generalmente no es considerado y es relegado al olvido por las autoridades de turno.

Para finalizar, creo que la preocupación central radica en cómo crear una valoración sobre el hecho de que muchos mundos son posibles (diálogo cultural), que el significado y la realidad son creados y no descubiertos y que los países y las regiones que avanzan y se desarrollan entiende esto como un principio básicos y los ponen en  práctica en cada una de sus acciones para así ir develando su propio desarrollo.

Sin lugar a dudas, a partir de la cultura se crea conocimiento, nos reconocemos y nos damos valor, y con está mirada  las comunidades que así lo entiende invierten en ello para intencionar su  progreso y su desarrollo.

Ricardo Cristi López

Director de Postgrado Universidad La República